«Eran muy buenos vecinos, tanto el padre como el hijo», apuntan los vecinos de la víctima y su presunto verdugo, que aseguran que «nunca se escuchó un grito, ni una palabra más alta que otra»
Los vecinos de El Picón, en Soto de Ribera, en el concejo de Ribera de Arriba, despertaban este martes aún conmocionados por el macabro suceso que tuvo lugar durante la noche. «Nos picaron a la puerta y empezamos a escuchar lío», declara una de las vecinas de la víctima y su presunto verdugo, padre e hijo. «Vimos a alguien tirado en el suelo pero no sabíamos quién era. Llamamos a la Guardia Civil pero no nos atrevimos a salir», declara.
-U190733422352joC-U2102045981665RuB-1200x840@El%20Comercio.jpg)
El ahora detenido, de 46 años, trabajaba por temporadas en una empresa láctea de la zona en la que residía y, tras presuntamente decapitar a su progenitor, M. A. M. C., septuagenario jubilado tras ejercer como celador en hospitales, llevó la cabeza de su progenitor hasta la glorieta de la misma localidad, a escasos cien metros de la vivienda donde ambos residían. En la misma rotonda, se abalanzó contra varios turismos, ensangrentado y medio desnudo, según indicaron testigos de lo sucedido. Depositó la cabeza junto al quitamiedos, no sin antes lanzarle patadas como si de un balón se tratara, según relataron las mismas personas.
«Eran muy buenos vecinos, tanto el padre como el hijo», apuntan residentes en El Picón, que aseguran que «nunca se escuchó un grito, ni una palabra más alta que otra».
Del presunto asesino de su padre opinan que «era muy buen chaval, algo debió darle en la cabeza», declaran.
.jpg)