En la noche del jueves, mientras realizaba mis labores de relaciones públicas en Pizza Resto La San Martin, tuve el privilegio de conocer a María, tocayas las dos, una vecina asidua del lugar, especialmente durante las noches musicales que se ofrecen los jueves y domingos.
Hasta aquí, podría parecer una historia común, pero no te conté que María, a sus 103 años, nos sorprende con su impecable estado físico y sus cinco sentidos perfectamente agudos.
Gustavo Bravo, el administrador de los bailes en Pizza Resto La San Martín, me había hablado de ella, y su historia merecía una entrevista. Así que, con cámara y micrófono en mano, y platos y camareros dando vueltas, nos encontramos para charlar.
Nacida en San Martin, cerca de la ubicación actual del Hospital Thompson, María se casó y se mudó a Devoto, pero hace un tiempo decidió regresar a su querido San Martin. Su amor por la música, especialmente por Sandro, y su pasión por el tango han dejado una huella indeleble en su vida. Además, es una asidua concurrente de las noches musicales en Pizza Resto San Martin, que se celebran los jueves y domingos con una variada selección de géneros musicales. Pero eso no es todo, María también tuvo una destacada carrera como profesora de bordado, con numerosas alumnas que aprendieron de su experiencia y talento.
RADIO ESTACIÓN LANDON (REL): ¡Buenas noches, María! Es un placer tenerte aquí. Contanos un poco más sobre tus raíces en San Martin, tu amor por la música y también sobre tu pasión por Pizza Resto La San Martín.
María (M): ¡Hola! ¡Gracias por tenerme aquí! Nací aquí, muy cerca del Hospital Thompson, y aunque me casé y me mudé a Devoto durante un tiempo, mi corazón siempre estuvo en San Martin. Hace unos años, decidí regresar y estoy feliz de haberlo hecho. En cuanto a Pizza Resto San Martin, ¡es mi lugar favorito! Los jueves y domingos, disfruto de sus noches musicales y me encanta bailar entre la gente y sentir la música en cada movimiento. Pero, sin duda, mi mayor amor en el mundo de la música es Sandro.
REL: ¡Sandro! ¿Podrías contarnos más sobre tu amor por él? (Nota de la redacción : María es de las mías, yo también incondicional de Sandro)
M: ¡Claro! Sandro es mi ídolo máximo. Fui a ver sus películas en el cine y también tuve el privilegio de asistir a sus recitales en vivo. Su música me llena el alma, y no creo que haya alguien que pueda igualarlo. Me considero una “nena” más de Sandro, siempre ha sido parte de mi vida y siempre lo será.
REL: Es maravilloso tener una conexión tan fuerte con la música. Además de Sandro, ¿hay algún otro género musical que te apasione?
M: Definitivamente el tango. Mi esposo y yo éramos apasionados del tango. Disfrutábamos bailarlo juntos y también cantarlo. Era una forma especial de conexión para nosotros. Aunque mi amor por Sandro está por encima de todo, el tango sigue teniendo un lugar muy especial en mi corazón.
REL: Es realmente inspirador ver cómo la música ha sido una parte importante de tu vida. Además de tus pasiones musicales, también eres una asidua concurrente de las noches musicales en Pizza Resto San Martin. ¿Qué te gusta de esos eventos?
M: Me encanta la energía y la diversidad de los shows musicales en Pizza Resto San Martin. Los jueves y domingos son mis días favoritos porque puedo disfrutar de diferentes géneros musicales, desde lo melódico hasta el rock, el tango y la cumbia. Es hermoso ver cómo la música une a las personas, y yo me siento feliz al estar allí, mezclándome entre la gente y bailando con ellos.
REL: Además de tus pasiones musicales y tu participación en las noches musicales de Pizza Resto, me enteré de que también tenías una destacada carrera como profesora de bordado. ¿Podrías contarnos un poco más sobre eso?
M: ¡Claro! Fui profesora de bordado durante muchos años y tuve el privilegio de tener muchas alumnas. Ellas aprendieron de mí y disfrutaron de este hermoso arte. Siempre me llamaban cuando necesitaban una buena bordadora, y siempre estaba dispuesta a ayudar. El bordado ha sido una parte importante de mi vida y me alegra haber compartido mi conocimiento con otras personas.
La historia de María nos muestra una vida llena de pasiones y experiencias enriquecedoras. Desde su amor incondicional por Sandro hasta su dedicación como profesora de bordado, María es un ejemplo inspirador de vitalidad y conexión con la música. Su participación en las noches musicales de Pizza Resto San Martin refuerza la idea de que la música es un lenguaje universal que une a las personas. A sus 103 años, María nos enseña a vivir la vida con alegría, disfrutando de cada momento y sin miedos. Su historia nos invita a reflexionar sobre la importancia de seguir nuestras pasiones y mantenernos conectados con las cosas que amamos.
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