Doble Cobro en San Martín: Advierten que el Municipio se Queda con tu Dinero si no Haces el Reclamo
San Martín, Buenos Aires – Crece la polémica en el partido de General San Martín luego de que se hiciera pública una denuncia por un presunto doble cobro en la tasa de Alumbrado Público. Según el concejal Andrés Petrillo, los vecinos están pagando dos veces por el mismo servicio: una vez en la factura de la empresa Edenor y otra en la boleta de tasas municipales.
Lo más grave de la situación, según expone Petrillo en un video dirigido a los vecinos, es que, si bien el oficialismo habría reconocido el «error» en una reunión de la Comisión de Hacienda del Concejo Deliberante, la devolución del dinero cobrado de más no será automática.
«Te cobraron mal, pero si no haces el reclamo, el intendente se queda con tu plata», afirma Petrillo, apuntando directamente a la gestión del intendente Fernando Moreira.
Denuncian Doble Imposición por Alumbrado Público en San Martín
El concejal Andrés Petrillo encendió las alarmas al calificar la situación como «injusta e ilegal». Según la denuncia, que fue acompañada por un pedido de informes presentado en el Concejo Deliberante, los contribuyentes de San Martín se ven afectados por una doble imposición tributaria-
«Actualmente, tanto la factura de Edenor como la liquidación de la Tasa ALSMI (Alumbrado, Limpieza y Servicios Municipales Indirectos), incluyen un ítem para este servicio, que termina siendo pagado dos veces», detalló el concejal. Petrillo asegura que «la existencia de esta estafa es de fácil comprobación. Cualquier vecino puede comparar ambas facturas, la de Edenor y la del Municipio, y descubrir lo que estoy denunciando».
Reconocimiento Oficial, pero con una Condición Polémica
El punto más crítico de la denuncia se conoció tras la última Comisión de Hacienda. De acuerdo con el video, los concejales del oficialismo reconocieron la existencia de un doble cobro de la tasa de alumbrado.
Sin embargo, la solución propuesta generó aún más controversia: el municipio solo reintegrará el dinero a aquellos vecinos que inicien formalmente el trámite de reclamo. Aquellos que no lo hagan, no recibirán el reembolso por los montos abonados de más, permitiendo que la administración municipal conserve esos fondos.
El Reclamo al Intendente Fernando Moreira
«Intendente Fernando Moreira, a vos te hablo», interpela Petrillo en su mensaje. «Ya que reconocen que cobraron dos veces por lo mismo, devuelvan la plata sin que los vecinos tengan que hacer el reclamo».
El concejal exige «transparencia y responsabilidad» a la gestión municipal, pidiendo que se respete a los contribuyentes y se ponga fin a lo que califica como «abusos disfrazados de tasas municipales».
¿Qué Deben Hacer los Vecinos Afectados?
Si bien no se ha detallado un procedimiento oficial por parte del municipio de San Martín, situaciones similares en otras localidades sugieren los pasos a seguir. En casos de doble facturación, se recomienda a los afectados:
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Verificar las boletas: Revisar detenidamente la factura de Edenor y la boleta de tasas municipales (ALSMI) para confirmar que en ambas figure el cobro por el servicio de alumbrado público.
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Reunir la documentación: Guardar copias de ambas facturas como prueba del doble pago.
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Presentar el reclamo: Dirigirse a las oficinas de recaudación o atención al vecino de la Municipalidad de San Martín con los comprobantes para solicitar el reintegro del monto cobrado indebidamente
Editorial: La Indignación de Pagar Doble y la Vergüenza de un Municipio que se Queda con lo que no le Corresponde
Hay errores administrativos y hay abusos de poder. Lo que está ocurriendo en San Martín con el doble cobro de la tasa de alumbrado público ha cruzado una línea inaceptable, transformando un fallo burocrático en una afrenta directa a la confianza y al bolsillo de cada vecino. Es una vergüenza que mancha la gestión pública y revela un profundo desdén por los contribuyentes.
Durante meses, los ciudadanos de San Martín han pagado dos veces por un mismo servicio: una vez en la boleta municipal y otra en la factura de Edenor. Un «error» que, casualmente, siempre beneficia a las arcas del Estado y nunca al ciudadano. Sin embargo, lo que convierte esta situación en un verdadero escándalo no es el error en sí, sino la respuesta deliberada y cínica del municipio.
Tras reconocer la falta, la solución propuesta es un insulto a la inteligencia y a la buena fe de la gente: solo se devolverá el dinero a quienes inicien un reclamo formal. En otras palabras, la administración del intendente Fernando Moreira ha decidido, conscientemente, quedarse con el dinero de todos aquellos que no naveguen el laberinto burocrático que ellos mismos han creado.
Pensemos por un momento en las implicancias de esta decisión. ¿Qué sucede con los jubilados que no tienen la facilidad para hacer un trámite online o la energía para hacer largas filas? ¿Qué pasa con el trabajador que no puede permitirse perder una mañana de trabajo para reclamar lo que es suyo por derecho? ¿Y qué hay de aquellos que, simplemente, no se enteran de esta situación porque no siguen las noticias locales al detalle?
La respuesta es cruel y simple: el municipio se quedará con su dinero. Se beneficiará de la desinformación, de la falta de tiempo y de la vulnerabilidad de sus propios vecinos. No es un acto de negligencia, es una decisión política que especula con la dificultad y la resignación de la gente.
Un gobierno responsable y transparente, al cometer un error de esta magnitud, debería asumir su responsabilidad de forma proactiva. Lo correcto sería implementar un sistema de reintegro automático, cruzando datos y acreditando los importes mal cobrados en las próximas facturas, sin necesidad de que el ciudadano mueva un solo dedo. Hacer lo contrario no solo es éticamente reprochable, sino que roza la ilegalidad, convirtiendo al Estado municipal en un acreedor ilegítimo que se enriquece a costa de sus contribuyentes.
Esta no es una cuestión de colores políticos, sino de decencia y justicia básica. El dinero que los vecinos pagan con esfuerzo no es un botín del que el poder de turno puede disponer a su antojo. Exigimos una rectificación inmediata. Exigimos la devolución automática de cada peso cobrado indebidamente.
Porque cuando un municipio le cobra doble a sus ciudadanos y luego les pone trabas para devolverles su propio dinero, no está cometiendo un simple error. Está demostrando para quién gobierna realmente, y está claro que no es para el vecino de a pie. Es una vergüenza que no debemos ni podemos tolerar.